Hoy estamos de celebración. Porque el
hecho de que un colega esté de cumpleaños es un motivo perfecto
para recordar aquello que lo hace único.
Celebramos que un amigo de su padre le
enseñase su primer juego de cartas con tan sólo 7 años.
Celebramos el día en que subió por
primera vez a un escenario en la Calle Corrientes, en Buenos Aires.
Celebramos que su perseverancia
autodidacta le empujase a especializarse en el ámbito de la
cartomagia.